BULLYING EN LAS AULAS DE EDUCACIÓN INFANTIL.

 Aunque es muy poco el bullying visto en las aulas de educación infantil, me parece importante realizar un 'post' sobre este tema; ya que puede ayudar o servir de guía cuando esto ocurra -tanto en infantil como en primaria, como en secundaria-. 

Este es un tema un poco sensible para mí, ya que fue una de las cosas que 'sufrí' en mi escolarización en primaria. Creo que es un problema que deberíamos de solucionar ya, pues es una experiencia que ninguna persona debería de vivir. Deberíamos de acabar con estos prejuicios, esta superioridad, con esta sociedad tan crítica. Es una pena que tengamos que seguir viviendo con estas experiencias y estas etapas. La vida es para disfrutarla, para hacer amigos, vivir experiencias con y sin ellos; es una oportunidad de crecer, reinventarse, sonreír... vivir. Me parece muy importante que todos los padres y todos los docentes también enseñen a sus alumnos e hijos que todos somos iguales, que hay que vivir, aceptar los cambios... Hay muchas personas diferentes a nosotros, y eso es lo mágico de esta vida: Descubrir culturas y caracteres nuevos, rasgos diferentes a los nuestros, aspectos nuevos y diferentes por descubrir... ¿No es emocionante descubrir cosas nuevas de personas diferentes a nosotros? Debe de ser un aspecto fundamental en las escuelas, y fomentar la igualdad y el derecho a la libre expresión, el respeto, la educación, etc. Y es una pena que siga habiendo problemas de este aspecto...

* Ahora sí... ¿Qué es el bullying? Generalmente (y según la RAE) el bullying es ese acoso físico o psicológico al que se someten, continuadamente, a un alumno sus compañeros. No obstante, la 'Wikipedia' define 'acoso escolar' y/o hostigamiento escolar, matonaje escolar o maltrato escolar a cualquier maltrato psicológico, verbal o físico producido entre estudiantes de forma reiterada a lo largo de un tiempo determinado tanto en el aula, como a través de las redes sociales: Ciberacoso. 

Normalmente, la clase de violencia en estas aulas es emocional. Los protagonistas de los casos de acoso escolar suelen ser niños con algún tipo de problema de conducta, familiar o social. Las víctimas suelen ser mayoritariamente niñas, pero también suelen serlo aquellos alumnos con algún tipo de discapacidad o problema físico/mental. 

El protagonista intimida a la víctima reiteradamente, implicando un abuso de poder por un 'agresor más fuerte' . El sujeto maltratado queda expuesto físico y emocionalmente generando unas secuelas psicológicas. La víctima vivirá aterrorizada con la idea de asistir a la escuela; puede que se muestre nervioso, triste y solitario. Incluso a veces puede llevar pensamientos de suicidios. Como hemos comentado antes, suelen ser más propensos al acoso escolar aquellos alumnos con una diversidad funcional, por ejemplo, síndrome de Down, autismo, síndrome de Asperger...

* Aunque la clasificación del acoso escolar es la siguiente: Físico, psicológico, verbal, sexual, social y ciberbullying; podemos clasificar el acoso escolar también bajo las siguientes pautas; añadiendo además la incidencia que hay entre las víctimas, según Iñaki Piñuel Zabala: 

- Bloqueo social (29'4%). Busca bloquear socialmente a la víctima. Todas ellas buscan el aislamiento social y su marginación impuesta por estas conductas de bloqueo. Por ejemplo, prohibiciones de jugar en un grupo, de hablar o comunicarse con otros, que nadie se relacione con él. Su objetivo es hacer llorar a la víctima, y presentarle a la sociedad como alguien flojo, indigno, débil, indefenso, estúpido... Desencadenando una estigmatización conocida como 'mecanismo de chivo expiatorio'. Es la más complicada de combatir ya que prácticamente es invisible y no deja huella. 

- Hostigamiento (20'9%). Acciones de hostigamiento y acoso psicológico que manifiestan desprecio, falta de respeto y desconsideración por la dignidad de afectado. El verbo 'hostigar' significa 'acosar con insistencia a una persona persiguiéndolo, molestándolo, golpeándolo...'. Encontramos: Desprecio, odio, ridiculización, burla, menosprecio, motes, crueldad, imitación burlesca... 

- Manipulación (19'9%). Pretende distorsionar la imagen social del niño y poner en contra él a los demás. Se intenta presentar una imagen negativa, distorsionada y cargada negativamente sobre la víctima. No importa lo que haga, todo es utilizado y sirve para inducir el rechazo de otros. Muchos niños se suman al grupo de acoso involuntariamente, percibiendo que la víctima merece el acoso que recibe, incurriendo a un mecanismo denominada 'error básico de atribución'. 

- Coacciones (17'4%). Pretende que la víctima realice acciones contra su voluntad. Los protagonistas pretenden ejercer un dominio y un sometimiento total en contra de la voluntad de la víctima. El que ésta haga cosas contra su voluntad proporciona a los que fuerzan esa voluntad diferentes beneficios. Los que acosan son percibidos como poderosos. Las coacciones implican que el niño sea víctima de vejaciones, abusos, conductas sexuales no deseadas que debe silenciar por medios a las represalias sobre sí o sobre los demás. 

- Exclusión social (16'0%). Su  objetivo es excluir al niño acosa. El 'tú no' es el centro de estas conductas. Al ningunearlo, tratarlo como si no existiera, aislarlo, impedir su expresión, impedir su participación en juegos, se produce el vacío social en su entorno. 

- Intimidación (14'2%). Los protagonistas persiguen amilanar, amedrentar, apocar o consumir emocionalmente al niño mediante una acción intimidatoria. Con ellas quienes acosa buscan inducir miedo en el niño. Sus indicadores son acciones de intimidación, amenaza, hostigamiento físico, acoso a la salida del centro escolar...

- Agresiones (12'8%). Se entiende por agresión a todo acto de violencia caracterizado por provocar daños intencionados a una persona directa o indirectamente. Los daños pueden ser a nivel físico, psicológico, sexual, patrimonial o simbólico y pueden suponer una serie de graves efectos sobre la salud o integridad de la víctima. Algunos ejemplos de agresiones pueden ser: Agresión directa, agresión física, agresión verbal, agresión sexual, agresión indirecta, agresión relacional, agresión cibernética, agresión hostil, instrumental, entre muchos otros más. 

- Amenazas (9'3%). Se define 'amenaza' como a aquella cosa o persona que constituye una posible causa de riesgo o perjuicio para alguien o algo. Los protagonistas amenazan, humillan, obligan o intimidan a la víctima para que haga o no haga algo. 

- Ciberacoso. Es también denominado acoso virtual. Consiste en el uso de medios digitales para molestar o acosar a una persona o grupo de personales mediante ataques personales, divulgación de información confidencial o falsa entre otros medios. Puede ocasionar daños psicológicos muy graves y de igual manera. El acoso pretende causar angustia emocional, preocupación y no persigue fines lícitos en su elección de comunicaciones. El ciberacoso puede ser: Psicológico, stalking, grooming, laboral, sexual, inmobiliario. Puede también ser académico, profesional, social y amoroso. 

* Causas que llevan a los protagonistas a realizar bullying. Aunque es verdad que no tiene por qué tener alguna enfermedad mental o trastorno de personalidad, normalmente presenta algún tipo de psicopatología. Presenta audiencia de empatía y algún tipo de distorsión cognitiva. Generalmente suele ser una persona que ha visto violencia con regularidad, que se acostumbra a ella. También puede ser porque esté pasando por una situación familiar o personal complicada, y la única forma de desahogarse sea intimidando a los demás con el fin de sentirse superior. 

* PREVENCIÓN O INTERVENCIÓN. La intervención simultánea sobre factores individuales, familiares y socioculturales, es la única vía posible de prevención del acoso escolar. Se puede realizar en distintos niveles. 

1ª. Responsabilidad de los padres, de la sociedad en conjunto de los medios de comunicación. Se considera prevención primaria a todas las acciones que buscan mejorar la convivencia y el clima del centro como el empleo de la mediación. 

2ª. Adoptar medidas concretas sobre la población de riesgo, es decir, promover un cambio de mentalidad respecto a la necesidad de denuncia de los casos de acoso escolar aunque no sean víctimas ellos. Y también sobre la población, es decir, el profesorado. 

3ª. Medidas de ayuda a los protagonistas de los casos de acoso escolar. Los centros educativos deben contar con protocolos de actuación establecidos para las situaciones de bullying a la vez que deben promover programas y campañas de prevención e intervención, para reforzar la capacidad de detectar o actuar frente a casos de bullying. 

Se recomienda impartir programas de estudios a maestros y a personal administrativo es escuelas para promover la equidad y detectar abusos. También, el conocimiento de códigos de conducta y el adiestramiento en cómo atender a los estudiantes expuesto ante el acoso, incluyendo módulos sobre la prevención del acoso sexual y la discriminación.